¡Que nadie se mueva! En Hercule Poirot: The London Case hemos sufrido un robo y todos sois sospechosos.

Todos en algún momento hemos vivido algún caso de Agatha Christie. Ya sea a través de sus novelas, o cuando las palabras atraviesan el medio y se reinterpretan en películas de suspense. O si no, ahora también en videojuegos. Ya tuvimos la suerte de poder revivir los casos de Agatha Christie – The ABC Murders hace un puñado de años, y desde entonces hemos visto cómo han ido apareciendo otros títulos de la misma temática. El último que nos atañe se trata de Hercule Poirot: The London Case, donde controlaremos a este excéntrico detective y le ayudaremos a resolver un caso que requerirá de todas nuestras células grises.

A vista de pájaro

Quienes hayan disfrutado de las sospechas y suposiciones de Agatha Christie – Hercule Poirot: The First Cases sabrán lo que se van a encontrar en esta siguiente entrega. Microids junto con el apoyo de Meridiem Games nos brindan una aventura que recoge el testigo de su anterior iteración, donde habrá que resolver un caso en el cual están implicadas varias personas. Nuestro deber será interrogar a cada uno de los sospechosos, recrear las escenas importantes del robo de un cuadro y dar con el verdadero culpable para que nuestra reputación no caiga en entredicho.

Si bien en otras sagas conocidas como los últimos juegos de Sherlock Holmes nos movíamos por espacios completamente tridimensionales, en Hercule Poirot: The London Case será diferente. Para aquellos momentos de exploración, contaremos con una cámara con perspectiva isométrica. Con esa vista aérea, nosotros tendremos que voltear el propio escenario para encontrar las pistas necesarias. Personalmente, a ni no me ha convencido esta manera de explorar las fases. Para empezar porque desde arriba se pierden muchos detalles pequeños que pasan desapercibidos., Y segundo. porque la rotación de la propia cámara no es fluida y corta el dinamismo del momento. Pese a estos pequeños problemas, lo relevante en este juego no será el escenario en sí, sino los momentos con los principales sospechosos del caso.

¿Dónde estabas a las 8 de la tarde el día de la desaparición?

Sin duda, lo mejor que tiene Hercule Poirot: The London Case es la manera de buscar al culpable del robo. Todo sucederá en la presentación de un cuadro muy célebre donde se representa a María Magdalena. Nosotros somos los encargados de velar por la seguridad del mismo cuadro…pero en un momento de despiste, y en pleno evento de inauguración con un grupo muy reducido de gente, la pintura es robada. Por supuesto, desde el momento de la desaparición los ocho invitados son presuntos ladrones, y no nos quedará otra que recrear cada momento con los allí presentes para poder sacar un veredicto correcto.

Mientras que en otros juegos de detectives no se da especial relevancia a la personalidad de los sospechosos, sus movimientos previos al momento del hurto, y otra serie de factores, en Hercule Poirot: The London Case lo vemos todo muy bien recreado. Me ha gustado resolver algunos acertijos donde tenemos que ordenar cronológicamente las acciones de nuestros sospechosos. También habrá que ver sus motivaciones, intentar captar posibles contradicciones en sus diálogos e incluso si hace falta, visitar algunas de las viviendas para recabar más información.

Sigue las migas de pan

Lo malo de todo esto es que pese a la profundidad en la percepción de nuestro detective por dar con el culpable, todo resulta muy lineal. Para poder realizar una suposición correcta, primero habrá que buscar las posibles pistas y juntar aquellas que tienen relación. Si por algún motivo juntamos dos pistas que no se corresponden, el juego nos permitirá seguir intentando dar con la opción buena hasta que lo consigamos. Esto hace que no haya opción a la equivocación, ni la posibilidad de seguir un camino distinto según las deducciones que nosotros mismos teníamos en la cabeza.

Pese a esta linealidad, siempre es agradable avanzar en la trama y los capítulos que la componen. Cada personaje es muy particular: desde una actriz muy conocida, hasta una escritora, un sacerdote o la propia dueña del museo. Todos y cada uno tiene su papel en la trama y desvelar sus secretos es un gusto. Al final, el que menos personalidad tiene pese a lo excéntrico que parece, es el propio Hercule Poirot, que en esta ocasión contará con un ayudante para que le eche una mano en el caso.

Sin trampa ni cartón

Gráficamente cabe decir que es un título muy justito. Los decorados y localizaciones que visitaremos podrían haber dado más de sí, al igual que las animaciones de los personajes. Facialmente expresan muy poco… y en un juego de esta índole es importante ver el comportamiento ante nuestro interrogatorio. Además, en ocasiones ni tan siquiera mueven los labios cuando hablan. Al menos los textos para seguir la trama están en español, aspecto muy importante en este tipo de juego donde tenemos que percatarnos de cualquier detalle por muy nimio que sea.

Conclusión de Hercule Poirot: The London Case

Microids junto con Meridiem Games quieren que volvamos a vivir un caso con este particular detective belga creado por Agatha Christie. En esta ocasión, en Hercule Poirot: The London Case deberemos resolver el robo de un cuadro que ha ocurrido delante de nuestras narices. Como en la anterior entrega, no nos quedará otra que hablar con los principales sospechosos e indagar en sus movimientos antes del hurto para dar con el verdadero culpable. La historia que envuelve al juego es muy buena, y siempre querremos saber más y más de nuestros sospechosos. Lástima que su aspecto visual no acompañe debido a problemas con su cámara y animaciones faciales. Pese a estas incidencias, estamos seguros que los capítulos que componen esta experiencia detectivesca nos mantendrán enganchados al mando hasta dar con el ladrón de pinturas.

Agatha Christie - Hercule Poirot: The London Case

39.99€
7

Nota Final

7.0/10

Pros

  • Buscar sospechas entre todos los invitados resulta divertido
  • Buenas deducciones y puzles para resolver
  • La historia atrapa

Cons

  • Las animaciones faciles y sincronización de labios no son muy buenas
  • La cámara en los momentos de exploración corta un poco el rollo
  • Es lioneal, sin posibilidad de emitir otros juicios ni acusar a otras personas

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