Garlic es un juego de plataformas en 2D bastante desafiante que te mantendrá pegado al asiento durante toda su aventura
Allá por el año 2021 se lanzó en Steam un desconocido título llamado Garlic. El juego desarrollado por el estudio Sylph resultó ser un juego de plataformas en 2D muy desafiante, que recordaba a títulos como Celeste. Hoy, tras dos años del lanzamiento oficial, Garlic es relanzado en Xbox de la mano de Ratalaika Games. Si quieres saber todo de esta interesante aventura, en Comunidad Xbox tendrás todo lo que necesitas saber.
Una Diosa que enamora
La historia de Garlic es muy sencilla. Como su nombre indica, nuestro protagonista es Garlic, un chico con cabeza de cebolla que quiere subir a la llamada Torre Sagrada, ya que ahí se encuentra la Diosa Cibernética la cual concede un deseo a todos lo que logran alcanzar la cima. Garlic alcanza la cima de la torre fácilmente, pero al ver a la Diosa se enamora completamente de ella por lo que debe de hacer todo lo necesario para intentar complacerla. Esta historia tan sencilla nos llevará por una multitud de mundos, donde nos deberemos de enfrentar a miles de enemigos y peligros y en el que prima sobre todo el humor. La historia, al ser un título de plataformas, no destaca en absoluto, pero cumple con su cometido y es muy divertida gracias al humor bizarro que está presente durante toda la aventura.
Morir, morir y más morir
Garlic es un juego de plataformas en 2D con aroma clásico. Recuerda enormemente a títulos como Celeste o Super Meat Boy, es decir, es un juego de plataformas basado en la precisión. Es totalmente imprescindible ser preciso en los saltos para poder superar en los niveles y superar la aventura, sobre todo en los mundos finales. Hay que dejar claro que en Garlic vas a morir, y mucho. El título es muy desafiante, y cualquier fallo tonto hará que pierdas la vida. Pero aunque se muera mucho durante la aventura, el juego no se hace repetitivo ni tedioso, al contrario, en ese desafío radica la diversión de Garlic. La aventura tiene una duración de unas 12 horas, aunque Garlic cuenta también con un modo bosh rush, muy desafiante también al igual que el modo historia.
Nuestro protagonista se controla de forma muy sencilla e intuitiva. Tenemos un botón para saltar y otro para hacer un dash, el cual es tan importante como el propio salto. El dash además de hacer que te impulses y recorras una mayor distancia, también puede ser usado para rebotar en el suelo o contra enemigos, siendo esto necesario para superar muchas fases. También podremos trepar paredes impulsándonos con ellas, aunque he sentido que esta mecánica a veces no responde correctamente. En el juego también hay hueco para los combates contra jefes, los cuales cumplen de forma correcta, aunque tampoco destacan. También existen diversos minijuegos que nos encontraremos entre los diferentes mundos y que suponen un soplo de aire fresco al juego.
Un Pixel-Art muy bonito
El diseño artístico y gráfico de Garlic es bastante bonito. Tiene un apartado pixel-art muy sencillo pero que cumple con creces. El protagonista y enemigos están muy bien diseñados y los escenarios pese a ser bastante simples, son muy bonitos. Desde los castillos, los lagos de lava o los ríos de ácido, todos los escenarios cumplen de forma correcta. Las animaciones de Garlic y de los enemigos tienen un gran nivel.
La banda sonora del título cumple sin más, son melodías bastante disfrutables y que acompañan bien a los diferentes niveles de la aventura, pero si un nivel se nos atraganta, que es muy posible, cabe la posibilidad de que la melodía se nos haga pesada. Los demás efectos sonoros son más bien normalitos, siendo el apartado que menos brilla de todo el juego.
Conclusiones de Garlic
Garlic me ha sorprendido. Es un juego de plataformas que recuerda a Celeste y que es muy divertido y desafiante. Un juego que pese a morir miles de veces, no genera una sensación de frustración, y que te mantendrá pegado a la pantalla durante las 12 horas que dura. Su bonito apartado gráfico y artístico, su bajo precio, sus minijuegos, su dificultad… Hay muchos puntos a favor de Garlic y muy poquitos en contra. Es cierto que a más de uno le puede echar hacia atrás su apartado pixel-art, pero si te gustan este tipo de juegos, vas a disfrutar tanto Garlic como yo.