¡Ooonda Viiitalll! Dragon Ball: Sparking! Zero es no de los mejores homenajes a la obra de Akira Toriyama y una auténtica delicia
En este mundo existen personas que suman y otras que restan, pero me atrevería a decir que también existen otras que sencillamente son seres de luz. Estas personas son aquellas que han dejado huella y han aportado significativamente un pedacito de su ser a la humanidad. Esta categoría está reservada a unos pocos privilegiados y estoy totalmente seguro que allá dónde este Akira Toriyama seguirá brillando con luz propia.
Lamentablemente ya han transcurrido aproximadamente seis meses desde que el gran Toriyama nos abandonara para ser uno con la fuerza, y es que el legado que ha dejado atrás es sencillamente impresionante. Y todo y con ello, aún nos sigue acunando con su maravillosa percepción de la vida y su obra; pues hace escasos días recibimos Dragon Ball Daima y Dragon Ball: Sparking! Zero. El legado de Toriyama es tan grande que muchas de las personas que convivimos desde los noventa con su obra, nos sentimos en deuda con él, ya que encontramos un refugio o una forma de evasión para desconectar del día a día gracias a Dragon Ball, su obra magna.

Bien, seguramente estéis aquí para conocer que tal es Dragon Ball: Sparking! Zero, así que no me voy a ir más por las ramas. A continuación, expondré todo aquello que me ha gustado, y lo que no, de este tan ansiado regreso de una de la sagas de lucha en 3D más amadas de los videojuegos. No obstante, ya os puedo asegurar que el resultado es sobresaliente y que esta nueva entrega ha hecho que la larga espera haya merecido la pena.
La saga Dragon Ball ha tenido una gran cantidad de adaptaciones al videojuego, siendo la gran mayoría de estas muy buenas. Sin embargo, cada cual tiene sus favoritas entre tanta variedad, aunque siempre existen algunas que nos han quedado grabadas para la eternidad, como: Budokai Tenkaichi, Xenoverse, Kakarot, FighterZ, entre otras. De este modo, Budokai Tenkaichi supone una de las más queridas por sus fans, por lo que Dragon Ball: Sparking! Zero tenía una ardua labor: contentar a una gran cantidad de aficionados ansiosos.
Dragon Ball: Sparking! Zero retoma la esencia de la saga Budokai Tenkaichi de muy buena manera, siendo una de las mejoras ofertas del género de lucha en 3D que hayamos podido disfrutar en los últimos tiempos. La fórmula que en su día la hizo brillar sigue presente, pues atesora todas las virtudes y características que pudimos ver por última vez hace 17 años; aunque ahora se han potenciado y modernizado. Escenarios que permiten el combate aéreo y terrestre, así como debajo del agua, libertad en sus gigantescos entornos, frenetismo y espectacularidad a raudales, son los puntos más fuertes que podríamos destacar.

La verdad es que la sensación tras agarrar el mando y adentrarnos unas horas en Sparking! Zero es similar a haber pausado la partida en Budokai Tenkaichi 3 y haberla reanudado años después, puesto que la experiencia de juego nos es muy familiar. La jugabilidad es prácticamente calcada, aunque obviamente han introducido numerosos cambios. Aun así, existe la posibilidad de escoger entre un sistema de combate clásico, teniendo una disposición de botones idéntica a las entregas anteriores, o bien, seleccionar un sistema de control moderno que acarrea algunos cambios en la distribución de esos botones. Asimismo, las novedades son bien palpables, ofreciendo una mejor movilidad que imprime más velocidad a los combates, nuevas formas de contraatacar o incluso nuevos ataques que brindan más opciones y herramientas al estilo de juego de cada jugador.
Como sus anteriores entregas, esta no es una en la que particularmente debamos ser habilidosos a los mandos. De hecho, todos recordamos esas tardes en las que venían algunos amigos a casa y a aquél, que sin haber tocado un videojuego en su vida, te ponía las cosas difíciles con simplemente aporrear el mando. Así pues, tampoco hace falta ser un hacha en Sparking! Zero para disfrutar de él, solamente basta con saber manejar todos los recursos que ofrece cada partida y saber movernos con nuestro personaje por el entorno. Por ello, es más importante hacer un uso inteligente de nuestra barra de Ki, medir bien el momento en el que encadenar un combo cuerpo a cuerpo con nuestras habilidades especiales, saber contraatacar, volar y cuando entrar en el modo Sparking para tener ventaja, por tiempo limitado, sobre nuestro oponente e incluso poder ejecutar nuestra definitiva, transformarnos, fusionarnos u obtener algún que otro estado de poder extra. También es interesante conocer mínimamente el escenario o, al menos, hacer un pequeño reconocimeinto del mismo para ver dónde podemos parapetarnos con el objetivo de cargar energía o cubrirnos de algún ataque enemigo.

Los combates ahora son más impactantes y espectaculares que nunca, ofreciendo una gran cantidad de herramientas, como: combos, técnicas, habilidades y ataques al servicio meramente del show. Todo está medido hasta el más mínimo detalle para asemejarse lo más posible a la serie de animación de Dragon Ball, y es que cada pelea parece un capítulo de la misma. Ahora el ritmo y la velocidad de los combates se antojan más vertiginosos, dejando así poco respiro al jugador. Con ello, se ha llegado a un nivel de pulido muy notable, haciendo que la reacción a nuestras interacciones sean prácticamente instantáneas. Asimismo, los elementos que en su día brindaban puro espectáculo siguen presentes, como los enfrentamientos de acometidas o Kamekamehas, aunque con algunos pequeños cambios en su interacción. Los intercambios de golpes se sienten contundentes, los cuales son enfatizados y apoyados por unos solidos efectos sonoros. Y a todo ello se suman unos escenarios amplios y destruibles, los cuales aportan dinamismo y dramátismo a todo el conjunto.
Como veis, todo está dispuesto para el disfrute y diversión del usuario. Lo cierto es que resulta muy fácil dejarse llevar por la efusividad de cada combate, y que realmente el videojuego se hace muy divertido de jugar. Resulta una de las mejores recreaciones y adaptaciones de las peleas que podamos ver de la serie de animación, puesto que sentimos como si estuviéramos siendo partícipes de un capítulo de la misma. Sin embargo, existen algunos flecos que podrían estar mejor pulidos, los cuales no emborronan el resultado final pero si hubieran hecho que la experiencia fuera perfecta. Esos aspectos que podrían ser mejores son: la cámara y las persecuciones. El primero, es un elemento que ya provocaba algún problema en entregas anteriores y a pesar que aquí se comporta muchísimo mejor, aún sentimos que la cámara se descontrola cuando las cosas se tornan realmente rápidas. Y el segundo, las persecuciones, provocan algún que otro problema según la posición en la que se encuentre el oponente, ya que en determinados momentos no se detectan correctamente las rutas, provocando movimientos extraños.

Uno de los mayores temores que tenía con Sparking! Zero, así como muchos de los fans que esperaban esta nueva entrega, era la cantidad de personajes que esta pudiera llegar a tener. Este escepticismo venía propiciado por la tendencia actual de lanzar los títulos del género con un elenco de personajes inicial escueto, para posteriormente rellenarlo con pases de temporada. Pues bien, en esta ocasión, nos han sorprendido de muy buena manera e incluso han superado nuestras expectativas. El plantel de personajes controlables es de 182 en total, teniendo en cuenta los incentivos de reserva, lo cual nos deja ante la oferta de combatientes más amplia que hayamos podido ver en un juego del género. Pero eso no es todo, puesto que se espera que esa cifra llegue a un total de 200 tras el lanzamiento al completo de su primer pase de temporada. De esta forma, Dragon Ball: Sparking! Zero superará lo visto en Dragon Ball: Budokai Tenkachi 3.
El conjunto total del elenco está formado por personajes de la gran mayoría de sagas o arcos de la serie, e incluso se incluyen algunos procedentes de las películas. Asimismo, se han tenido en cuenta los más recientes que pudimos ver en Dragon Ball Super, teniendo en cuenta hasta las nuevas transformaciones o formas que se ven en la misma. Con todo ello, podemos manejar a Beerus, Jiren, Janemba, Goku GT, Vegeta, Broly, Piccolo, Son Gohan, Krilin, Yamcha, Trunks, Androide nº 17, Androide nº 18, Black Goku, entre otros muchos más… Como veis, la oferta es muy amplia y aunque se han quedado algunos personajes fuera, sentimos que la selección de todos los presentes está hecha con muy buen atino.
Obviamente podríamos echarle en cara, como se ha criticado por algunos lados, que muchos de los luchadores del plantel son formas o transformaciones de un mismo personaje. Sin embargo, personalmente no es una cosa que yo pondría como punto negativo, puesto que cada personaje y transformación cuenta con sus propias habilidades, definitivas y técnicas. Por lo tanto, estos no se sienten iguales por completo, ya que se ha trabajado correctamente en diferenciarlos tanto en lo visual como en lo jugable.

Por otra parte, todos y cada uno de los integrantes del elenco seleccionable se ha recreado de una forma estupenda, siendo muy fiel al material original en todo momento. Es tal la fidelidad que se ha imprimido al producto que se han tenido en cuenta detalles muy bestias, como: animaciones o movimientos calcados a algunos momentos presenciados en los episodios del anime, ataques o interacciones entre personajes. Por ello, se nota mucho el mimo y el cariño con el que se ha tratado la obra original, lo cual es algo de agradecer tanto por el fan como por el jugador final.
Cambiando un tanto de tercio, nos gustaría pasar a comentar la oferta jugable en cuanto a modos de juego se refiere, pues Sparking! Zero trae contenido a raudales. En esta nueva entrega nos encontramos con muchas opciones tanto para un solo jugador como para jugar acompañados o en línea. Entre ellos podemos encontrar: “Combate de episodio”, “Combates personalizados”, “Batalla vs CPU”, “Entrenamiento”, “Batalla en línea” y “Torneos”.
De entre todas estas opciones, “Combate de episodio” sería, sin lugar a dudas, la más destacable. Esta nos propone una modalidad de historia dividida en ocho campañas distintas, las cuales están protagonizadas por distintos personajes, concretamente por: Goku, Vegeta, Trunks, Piccolo, Son Gohan, Black Goku, Freezer y Jiren. De todas ellas, la de Goku es la campaña principal y la que más duración tiene, alrededor de las 10 horas. El resto de ellas nos pueden tomar entre 1 u 2 horas completarlas, siendo así buenos complementos de todo el compendio y requiriendo un promedio de 20 horas para terminarlas todas. Por otra parte, también nos encontramos que cada historia tiene sus propias bifurcaciones, es decir, que según una serie de condiciones o decisiones tendremos ramificaciones y finales distintos, llegando incluso a presenciar unos “what if” muy curiosos. La mayoría de las veces no sabemos las condiciones con las cuales se detonan algunas rutas alternativas, por lo que resulta muy gratificante ir descubriendo qué las propicia a medida que jugamos. Estas pueden ir desde aguantar peleando contra nuestro oponente un determinado número de minutos, acabar con nuestro rival de una forma o con una técnica determinada o incluso en un tiempo límite, entre otras más que podréis descubrir cuando os adentréis en esta modalidad.

La premisa del modo historia del título no es ninguna sorpresa, ya que esta rememora los momentos más destacables de todos los arcos de Dragon Ball Z, Dragon Ball Z: La Batalla de los dioses, Dragon Ball Z: La resurrección de F y Dragon Ball Super. Así pues, iremos repasando todos los acontecimientos de los materiales anteriormente citados a medida que vamos presenciando algunos de los enfrentamientos más emblemáticos de la licencia. El desarrollo de todos estos episodios se hace mediante escenas semi-estáticas que combinan con alguna cinemática más trabajada con el propio motor del juego. De este modo, se va narrando poco a poco y de una forma resumida todos los sucesos que Goku y compañía viven a lo largo de toda la aventura. Asimismo, las propias peleas tienen diálogos que aportan más peso narrativo a la historia, siendo así un recurso bastante orgánico en el conjunto. Sin embargo, este acarrea un problema para todas aquellas personas que no sean afines a la lengua de Shakespeare, puesto que las voces solamente están localizadas al japonés e inglés, haciendo que leer los subtítulos mientras intercambiamos golpes a toda velocidad se torne una tarea un tanto complicada.
Otro modo de juego interesante es el “Combate personalizado”, el cual nos permite ser el director de nuestros propios episodios de combate. Gracias a un potente editor y a esta modalidad, se nos permite crear cualquier situación por inverosímil que se antoje. Esta personalización nos deja escoger que personajes queremos que aparezcan en nuestra historia inventada y como queremos que se desarrollen las peleas, decidiendo incluso que condiciones queremos que detonen los eventos durante los propios combates. Esta faceta del juego nos deja ser todo lo creativos que podamos imaginar, ya que incluso construye cinemáticas con los personajes que hemos seleccionado. Sin embargo, esta completa herramienta puede resultar un tanto abrumadora de entrada, ya que cuenta con un montón de opciones y la interfaz de edición no es muy intuitiva o clara. Aunque si tenemos la suficiente paciencia para familiarizarnos con el entorno de edición, podemos acabar subiendo nuestra creación a internet para que otras personas puedan jugarla. Y como no podía ser de otra forma, también existe un apartado dónde explorar las creaciones de la comunidad y poder disfrutar de las que más nos gusten.

El resto de modalidades jugables no tienen mayor misterio. Como hemos citado anteriormente, tenemos la posibilidad de disputar combates contra la CPU o contra amigos en local o en línea, pudiendo configurar bastantes parámetros de los mismos, como: el escenario, la dificultad (en caso de jugar contra la IA), las reglas del combate, la música, los personajes, etc… Aquí tenemos pocas novedades, aunque si me gustaría destacar el completo Modo Entrenamiento que nos sirve como introducción y tutorial al juego. Os recomendados encarecidamente que le echéis un vistazo antes de comenzar a adentraros en cualquier otro modo, os será de bastante ayuda. Por otro lado, también querría comentar unas decisiones en cuanto a los combates en local y multijugador que no he acabado de entender muy bien. Resulta que para jugar a pantalla dividida solamente podemos hacerlo en el mapa de “Cámara del Tiempo Hiperbólico” y que en cuanto al multijugador se refiere, este no cuenta con juego cruzado entre plataformas… Siendo esta última, una característica que a día de hoy se está introduciendo en prácticamente todos los títulos del género.
En cuanto al apartado gráfico se refiere, Dragon Ball: Sparking! Zero supone uno de los títulos más impactantes y atractivos que hemos visto de la franquicia. Dragon Ball: FighterZ ya era muy espectacular, aunque este no era tan exigente en este apartado como el que ahora nos atañe al ser en 2.5D. Sparking! Zero es un juego muy exigente, eso es latente en todo momento. Sin embargo, el acabado gráfico es espectacular, con unos modelados exquisitos, unas animaciones super cuidadas y una cantidad de efectos en pantalla abrumador. Las peleas se notan fluidas a pesar de toda esta carga gráfica y, en general, todo tiene mucho detalle. De esta forma, Spike Chunsoft ha sabido sacar mucho partido del motor Unreal Engine 5, logrando un portentoso apartado que se mantiene estable en rendimiento con un HDR de calidad y 60fps con posibilidad de 4K Ultra HD.
Por último, el apartado sonoro está a un muy alto nivel como el resto de elementos del juego. La banda sonora atesora temas procedentes del propio anime, como algún tema del Torneo del Poder de Dragon Ball Super. Asimismo, nos ha maravillado la cantidad de temas creados para la ocasión que acompañan de manera muy atinada a la épica de las peleas. De este modo, el instrumental toma protagonismo cuando las cosas se ponen tensas y acompaña a las mil maravillas la acción que presenciamos. La parte negativa de este apartado es que muchas de las pistas de audio de la serie se acabarán incluyendo en el juego mediante contenidos de pago.
Conclusiones
Dragon Ball: Sparking! Zero es todo cuanto habíamos deseado y más. La espera ha merecido la pena, pues hemos acabado recibiendo un juego de lucha con unas cotas de calidad muy altas. La fórmula de la saga Budokai Tenkanchi se potencia y moderniza para ofrecernos los combates más frenéticos de la saga, así como el plantel de luchadores más completo que hayamos podido ver hasta la fecha. La cantidad de contenido que se incluye de base en el videojuego es abrumador y hay opciones para todos los públicos; desde modos para un jugador hasta combates multijugador en línea. Es cierto que el resultado final tiene ciertos defectos que le alejan de la perfección, pero no podríamos estar más satisfechos con esta nueva entrega que recrea de la mejor forma los combates de la obra de Akira Toriyama. Por ello, recomendamos encarecidamente a todas aquellas personas que sean amantes de Dragon Ball darle una oportunidad a Dragon Ball: Sparking! Zero, os aseguramos que no os arrepentiréis.
Dragon Ball: Sparking! Zero
79.99€Pros
- Los combates son puro espectáculo
- La obra tiene una cantidad de contenido muy completa: 8 campañas, torneos, combates vs. CPU...
- La recreación y la fidelidad con la obra de Akira Toriyama es sencillamente maravillosa
Cons
- Falta de pulido en el comportamiento de la cámara cuando la acción se pone frenética y del comportamiento de las rutas en las persecuciones
- Limitaciones en el modo pantalla dividida
- Falta de juego cruzado entre plataformas