La desarrolladora Exit Plan Games y el editor Untold Tales nos traen Gang-On Balls: Chronicles, una aventura de plataformas en 3D que sorprende gratamente
El género de los juegos de plataformas en 3D es un género que surgió con las consolas de 32 bits y que se saturó en las máquinas de 128 bits. Desde ese entonces, rara vez juegos que apuestan por esta propuesta. Siempre existirán sagas como Mario, Crash Bandicoot o Ratchet & Clank donde el eje principal son las plataformas en entorno 3D, pero es en los títulos indie donde podemos encontrar más este tipo de propuestas, Gang-On Balls: Chronicles es una de ellas. Este juego que nos pone a los mandos de unas pelotas totalmente personalizables, recorreremos escenarios totalmente destructibles en busca de cientos de coleccionables. ¿Queréis saber como ha salido esta propuesta? Comenzamos.

Rueda y destruye
La premisa de Bang-On Balls: Chronicles es sencilla. Nos encontramos en unos estudios de grabación donde se van a filmar 4 películas diferentes. Nosotros seremos una pequeña bola que deberemos formar parte de esta película cumpliendo una serie de encargos, donde deberemos combatir con diversos enemigos, recoger infinidad de coleccionables y provocar el caos allá por donde rodamos. El humor es una parte esencial del título, cada escenario o película será una representación de algún hecho histórico con un tono humorístico. Por lo que, por ejemplo, nos veremos influyendo en los acontecimientos de la carrera espacial entre EEUU y la Unión Soviética. Esto da lugar a situaciones bastante surrealistas, como unas bolas pintadas con la bandera estadounidense que intentan detenerte de mandar un cohete a la luna.

Varias bolas son mejor que una
Gang-On Balls: Chronicles destaca por la magnitud de sus escenarios, siendo estos totalmente destructibles. El juego consta de cuatro mundos diferentes, además de un mundo central. Estos son gigantescos. Cada uno tiene una serie de objetivos principales, pero además podremos encontrar otros objetivos ocultos, además de una cantidad enfermiza de coleccionables escondidos. Por ello, recomiendo totalmente explorar los diversos mundos en busca de más de una sorpresa. Completar cada mundo al 100% puede llegar a suponer más de 3 horas, por lo que si eres un completista como yo, tendrás juego para rato. Si hablamos de los coleccionables, estos son elementos estéticos para nuestra pequeña pelotita. Estos suelen ser meramente estéticos, aunque algunos otorgarán diversos poderes a nuestro personaje, como convertir a los enemigos en ovejas. Además, por los escenarios se encuentran esparcidos unos orbes azules, que servirán como moneda para comprar más objetos estéticos.
Los controles son muy básicos, tenemos un botón de salto, otro de ataque, impulso y si disponemos de un escudo, podremos cubrirnos con él. Un aspecto negativo es el control de la cámara. Y es que su control es un poco malo, cuesta colocarla correctamente durante los combates o en espacios pequeños, donde no sabremos muy bien donde nos encontramos en multitud de ocasiones. Los combates también pueden ser un poco repetitivos, ya que se basan en usar el impulso contra las demás bolas, excepto cuando se tratan de enemigos con escudo o de jefes finales. Estos jefes suelen aportar alguna mecánica nueva para no caer en la repetición. Un aspecto bastante positivo, es que tenemos la posibilidad de jugar en cooperativo, tanto en pantalla dividida para 2 jugadores, como online para 4. Esto hace la obra mucho más divertida y ofrece multitud de posibilidades para completar los diferentes escenarios.

Claros y oscuros
El aspecto gráfico de Bang-On Balls: Chronicles es bastante bueno. El título corre con el motor Unreal Engine 4 y eso se nota. Los entornos coloridos están muy bien recreados y tienen bastante detalle, por lo que el juego entra por los ojos. Los efectos de partículas cuando destruimos los escenarios también está muy bien implementado, al igual que el uso del fuego, que se ve bastante espectacular. Otro cantar es la parte técnica, donde el juego cuenta con más problemas. El juego ha sido analizado en Series X y las bajadas de frames cuando hay muchos elementos en pantalla son comunes, al igual que las congelaciones de pantalla. No es un gran problema que haga el juego injugable, pero sí es bastante molesto cuando esto ocurre.
En cuanto al sonido, este es correcto sin más. El juego no cuenta con voces, ya que las pelotas solo emitirán una serie de sonidos al estilo de los juegos de Lego clásicos. Las melodías que nos acompañan durante la aventura son simpáticas, pero no destacan demasiado. Los demás efectos de sonido también cumplen sin muchos alardes. Cabe destacar que el juego se encuentra traducido al castellano.

Conclusiones
Gang-On Balls: Chronicles es un juego que me ha sorprendido gratamente. No sabía nada de él hasta que fui el elegido de realizar su análisis, y no puedo estar más contento con ello. Tal vez el título tenga unas mecánicas que se hagan un tanto repetidas y algunos fallos técnicos, pero en su conjunto cumple con creces. Es una obra como las de antes, plataformas, coleccionables y diferentes mundos que explorar, pero con la posibilidad de jugar junto a amigos. Esto hace que el juego gane en posibilidades y diversión. Para los amantes de los títulos de plataformas en 3D, en Gang-On Balls: Chronicles encontramos una propuesta más que recomendable.
