Análisis de Monster Hunter Wilds para Xbox Series X. La entrega más accesible para los iniciados en la caza de monstruos.
Se podría decir perfectamente que Monster Hunter es la gallina de los huevos de oro de Capcom. MH World, la entrega más realista y grande de la saga, ya ha vendido más de 25 millones de copias desde su lanzamiento en 2018. Además, todavía sigue en activo gracias a sus expansiones y se ha convertido en el juego más vendido de la historia de la empresa de Osaka. Ni siquiera el popular (aunque menos ambicioso) MH Rise de 2021 ha conseguido superar estas cifras. Ahora, el director Yuya Tokuda pretende alcanzar los bestiales números de World con Monster Hunter Wilds.
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Llámalo secuela, llámalo sucesor espiritual, este título busca expandir los límites de la serie aprovechando las posibilidades de la nueva generación de consolas y, sobre todo, atraer a más jugadores a la saga.
Wilds es un juego diferente a lo que hemos visto anteriormente, pero, al mismo tiempo, se siente familiar y conserva esa magia de la fórmula original que te hace querer seguir cazando nuevos y peligrosos monstruos.
Y una vez dicho esto, afilad vuestras armas y preparad la montura, porque es hora de adentrarse en las tierras salvajes de este análisis.
Bienvenidos a las Tierras Prohibidas
La historia de Monster Hunter Wilds nos transporta a las Tierras Prohibidas, una región desconocida y salvaje donde nadie ha osado adentrarse nunca. Esto es debido a sus extremas condiciones climatológicas. Nuestra misión como miembros del Gremio de Cazadores es investigar estas tierras y descubrir el origen de Nata, un misterioso niño que ha venido pidiendo ayuda después de que su pueblo fuese atacado por un extraño monstruo al que llama el Espectro Blanco.

Esta campaña, más que nada, sirve como introducción en el juego. Como es normal en la saga, la trama sigue sin tener demasiada relevancia dentro del conjunto de la obra (a pesar de que en esta ocasión Capcom se ha esforzado en darle mucho más peso y carga emocional a los personajes). Más bien funciona como un largo tutorial en el que nos enseñarán las principales mecánicas de combate y supervivencia o a movernos por el mundo dentro de una historia que, simplemente, va sucediendo.
Esto no quiere decir que sea algo malo. De hecho, entiendo dicha decisión por parte de Capcom para que los iniciados en MH encuentren una buena puerta de entrada en Wilds. No obstante, si ya eres veterano en la saga, es probable que las primeras 12 horas se te hagan un poco bola y acabes harto de ciertas situaciones o diálogos que no llevan a ninguna parte.
Aquí se viene a cazar monstruos
Lo realmente interesante de Monster Hunter Wilds llega tras los créditos del juego. Después de habernos enfrentado a monstruos de rango bajo (1 estrella) durante toda la campaña principal, el juego nos dará la posibilidad de investigar y cazar libremente criaturas de rangos más altos. Es decir, mucho más peligrosas.
Para abatir monstruos contaremos desde el primer momento con un total de 14 tipos de armas disponibles para que probemos y escojamos la que mejor se adapte a nuestra forma de jugar. Como novedad en esta entrega, tendremos la posibilidad de equiparnos dos tipos de armas para intercambiarlas en pleno combate según las circunstancias.

Esto se traduce en que, por ejemplo, podremos ir armados con una espada larga o pesada para combatir a media y corta distancia. Pero si nuestra presa se vuelve demasiado agresiva, sacaremos la munición pesada de nuestra ballesta o arco para atacarla a distancia sin correr riesgos.
Combates sacados de un anime
Donde más brilla Monster Hunter Wilds es, sin duda, en su combate. Ahora, este es más espectacular que nunca gracias a los nuevos combos especiales de cada arma. De esta manera se nos anima a experimentar con cada una de las armas para descubrir todos sus movimientos y, cuando conseguimos ejecutarlos, son todo un épico espectáculo.

Otra novedad de Wilds es que ahora tendremos mucho más claro el daño que infligimos a los monstruos gracias al sistema de heridas. Conforme luchemos con una criatura, esta irá poco a poco adquiriendo cicatrices. Si pulsamos el gatillo izquierdo del mando activaremos el llamado “modo preciso”, una retícula que nos permite apuntar a estos puntos débiles para castigarlos sin piedad. Acertando estos golpes, no solo conseguiremos materiales asegurados, sino que también podremos llegar a tumbar al monstruo. Además, el modo preciso también ayuda a fijar mejor a nuestra presa y evita esos frustrantes golpes al aire que pueden dejarnos vendidos.
Nuevas fauces y viejas garras conocidas
Pero las verdaderas estrellas aquí son los monstruos y Wilds nos ofrece un bestiario impresionante tanto en cantidad como en calidad. No quiero entrar mucho en detalle porque lo realmente bonito de la experiencia Monster Hunter es descubrir a las criaturas, pero os diré que su número total es similar al que tuvo Wilds en su versión base (29 contando variaciones). Dentro de este catálogo encontraremos especies inéditas como el Chatacabra, el Rey Dau o el Lala Barina y también otras archiconocidas como el mítico Rathalos.

Cada uno de ellos sigue teniendo sus propios patrones de ataque y comportamiento únicos que cambian durante el combate para que estos sean todavía más emocionantes. Como es habitual, tendremos que cazar varias criaturas de la misma especie para avanzar en su investigación y que se nos revele a que elemento es débil o qué partes de su cuerpo son rompibles.
Directos al grano
Una cosa que cambia en Monster Hunter Wilds con respecto a otras entregas, es que ahora no necesitamos tomar varias muestras para conocer el rastro del monstruo que queremos cazar. De esta forma las batidas son mucho más directas y, aunque esto empañe un poco la esencia original, yo personalmente lo agradezco, porque llegaba a hacerse algo tedioso. Aquí directamente se nos revelará en el mapa el paradero de nuestro objetivo y podremos ir a por él montados en nuestro Seikret.
Además, el viaje rápido mediante la creación de campamentos nos permitirá teletransportarnos a determinadas zonas del mapa para reabastecernos o equiparnos con nuevas armas (siempre que no estén destruidos). Asimismo, Alma, la nueva Encargada del Gremio, nos acompañará en cualquier salida. Este NPC es básicamente un tablón de misiones móvil, lo cual nos facilita el acceso a nuevas misiones y encargos sin tener que volver a la base del Gremio.
El Seikret, tu nuevo compañero emplumado
En Wilds nos toparemos con un mapa gigantesco compuesto por cuatro pequeños mundos abiertos por los que nos podemos mover con libertad gracias al Seikret. Esta plumífera criatura será nuestra montura durante todo el juego y, al mismo tiempo, hace de inventario de mano para las cacerías.

Realmente, el Seikret tiene más usos que una navaja suiza. Sirve tanto como herramienta de viaje, como de baúl de objetos de apoyo, extensión de inventario o plataforma de salto para ataques aéreos. También es muy buena opción por si necesitamos replegarnos para curarnos, afilar el arma, cambiarla por la secundaria o crear un objeto rápidamente. Además, los Seikret son capaces de seguir rastros. Con lo cual, las persecuciones son más guiadas al moverse la montura de forma automática al sitio indicado mientras nosotros nos dedicamos a recoger materiales con la eslinga y a admirar el paisaje.
No obstante, si queremos, también podemos optar por manejarlo nosotros mismos. El manejo manual del Seikret tiene algo de fricción y puede ser algo incómodo en sitios estrechos. Pero, por otro lado, este dominio complejo en ciertas ocasiones afianza la sensación de estar domando un animal de verdad.
Un gigantesco coto de caza que respira vida
Las Tierras Prohibidas son un basto territorio dividido, como mencionaba antes, en cuatro grandes regiones. Cada una de ellas cuenta con sus propios biomas y criaturas autóctonas. Los escenarios ahora son dinámicos y sufren cambios con el clima, otro de los grandes añadidos de esta entrega.
El clima es un complejo sistema que afectará directamente al gameplay. Habrá monstruos que invoquen tormentas eléctricas para potenciarse y ser mucho más peligrosos. Otros aprovecharán las ventiscas de arena y los terrenos fangosos para esconderse y atacar cuando estemos desprevenidos. Además, la inclusión de ciclo día/noche influirá en el ecosistema, haciendo que ciertas criaturas sean más o menos activas dependiendo de la hora del día. Todos estos cambios y apariciones de monstruos en el mapa se nos indicarán en pantalla todo el tiempo para que podamos planificar bien nuestras cacerías.

Y hablando de ecosistema, hay que alabar el excelente trabajo que ha realizado el equipo de diseño en este aspecto. Cada bioma nos transmite la sensación de estar dentro de un mundo vivo y cambiante. En el desierto, por ejemplo, encontraremos oasis que sirven de lugar de concentración de herbívoros que buscan un sitio donde beber agua. Pero, a su vez, esta reunión de grandes mansos atraerá a los grupos de carnívoros de la zona que no dudarán en atacarlos.
Las batallas territoriales entre especies ahora alcanzan nuevos niveles. Ya no es que los enfrentamientos entre monstruos alteren el terreno de caza, sino que estos también podrán formar alianzas para compartirte como menú o establecer jerarquías. Dichos cambios imprevisibles harán que cada misión se sienta emocionante.
Fashion Hunter
Cazar muchos monstruos significa poder lucir mejores y más vistosas armaduras. Gemma es la especialista en crearlas. La herrera del Gremio nos fabricará nuevo equipamiento siempre y cuando le consigamos los materiales necesarios. La mayoría de los nuevos sets de armadura de Monster Hunter Wilds son increíbles (sobre todo los de nuestro camarada Feline) y ofrecen diferentes ventajas en combate si los llevamos completos. Además, cada pieza cuenta una historia y refleja perfectamente al monstruo del que proviene. Tampoco se quedan atrás las armas, pues, tal y como Capcom prometió, son mucho más espectaculares si cabe que las de MH World.

A nivel técnico, el juego funciona a una tasa bastante estable por encima de los 60fps. En toda mi experiencia de juego (sin probar el online) apenas he sufrido caídas de frames ni tirones. El título ofrece tres modos para que escojas entre mejor calidad de movimiento, mejor calidad gráfica o algo equilibrado. Yo me decanté por el último y las sensaciones han sido bastante positivas.
Respecto al diseño de escenarios, el motor RE Engine hace verdaderas maravillas y nos regala parajes llenos de luz y color que nos dejarán con la boca abierta. Sin embargo, estos escenarios son pocos en comparación a todos los biomas desérticos y grises que tiene el juego. No quiero decir que estos sean menos chulos, pero sí que contrastan demasiado.
Por último, tendremos una banda sonora que vuelve a deleitarnos con temas orquestales épicos que se adaptan a la intensidad de cada una de las cacerías. Estos se combinan con otros más tranquilos en las zonas de descanso y gestión. Por su parte, cabe destacar los excelentes efectos ambientales o los rugidos de los monstruos, los cuales nos sumergen aún más en el juego. También es digno de mención su doblaje en castellano, el cual, a excepción de ciertas interpretaciones (Nata, te miro a ti) está bien.
En definitiva
Monster Hunter Wilds nos invita a explorar un mundo vibrante y lleno de misterios, donde la naturaleza y las criaturas que la habitan juegan un papel crucial. A través de la caza, la recolección y la mejora de nuestro equipo, nos preparamos para hacer frente a desafíos cada vez mayores. La variedad de armas y la personalización de nuestro personaje nos permiten adaptar nuestro estilo de juego según la situación, lo que hace que cada cacería sea única y emocionante.
Es cierto que su poco interesante campaña y la automatización o simplificación de algunas mecánicas lastren un poco la experiencia original. Además, ahora mismo su cantidad de contenido es mucho menor al de entregas anteriores. No obstante, al igual que sus criaturas, Monster Hunter Wilds irá evolucionando durante los próximos meses, haciéndose más grande gracias a sus famosas expansiones o eventos.
Aún con todo ello, estamos ante una muy buena entrega de la saga que consigue reinventar (en cierta medida) la tan popular franquicia de Capcom. De esta manera intenta llegar a jugadores novatos sin renunciar demasiado a su esencia. Un título que invita a adentrarnos en tierras salvajes para nuevos cazadores.

Monster Hunter Wilds
79,99 €Pros
- Combates sensacionales y muy espectaculares
- El sistema de heridas hace que el daño que infligimos sea más claro y se sienta real
- El modo preciso hace que el gameplay sea más cómodo
- Excelente diseño de los nuevos monstruos
- Los biomas y escenarios se sienten vivos
Cons
- Historia principal muy simple con unos personajes que, en su mayoría, son planos
- A falta de futuras expansiones anda algo flojo de contenido