El simulador de barcos, Ships Simulator aterrizó en consolas Xbox el pasado 21 de diciembre de la mano de Ultimate Games.
Estos días he tenido la posibilidad de jugar Ships Simulator. Se trata de un simulador de barcos. En el podremos ser capitán, maquinista, estibador, mecánico y hasta responsables de prevención de riesgos. Como recordatorio, hace ya algunas semanas que os traje por aquí el análisis de Ships Graveyard Simulator donde desguazamos barcos y que a pesar de ser técnicamente anticuado era muy divertido.
Barcos y más.
Para empezar Ships Simulator nos da la opción de elegir entre 3 barcos diferentes, un portacontenedores gigantesco, un buque de construcción de aguas profundas y un barco de transporte semi-sumergibles. Tendremos que realizar algunas reparaciones iniciales para ponerlos en liza, pero esto no supone ningún reto porque contamos con dinero suficiente para llevar a cabo los arreglos. Una vez tenemos los barcos reparados tendremos nuestras primeras misiones disponibles. No podemos elegir la que queremos hacer. Estas nos irán apareciendo de una en una de manera lineal. La primera de las misiones es descargar contenedores del barco con una grúa.

Y aquí nos topamos con el primer problema. Los controles son un auténtico dolor de muelas, ya que tiene invertido el joystick de la cámara y del movimiento. Es decir, en todos los juegos la cámara se mueve con el joystick derecho, pero aquí será con el izquierdo. Esto podría justificarse si técnicamente para jugar fuera necesario, pero no es así, ya que la grúa se mueve con la cruceta que también tenemos en el dedo izquierdo, por lo que es imposible mover la cámara y la grúa a la vez. Otro punto en contra es que la cruceta que mueven la grúa se usa también de manera poco ortodoxa.

Misiones tediosas.
Una vez completada la primera misión de descargar contenedores vamos con la segunda, que para originalidad del título es … ¡cargar contenedores! Primero los bajamos, luego los subimos. Si seguimos avanzando en las misiones estas no mejorarán en cuanto a diversión y jugabilidad, tendremos que atracar el barco en el muelle a una velocidad ridícula que hará que nos desesperemos, luego realizar travesías tediosas…

Cuando hemos terminado con esta tortura, llegará la pesadilla. Trasladar mercancías entre el punto A y el punto B. Para empezar el barco se mueve extremadamente lento, no contamos con un radar para ubicar los puntos ni orientarnos. Si la misión se lleva a cabo de noche no veremos absolutamente nada. Los islotes y peligros no están señalizados por faros por lo que solos los veremos cuando estemos encima, aunque como nos movemos a una velocidad ridícula, nunca estaremos en peligro.
Más acción
Otra parte del juego son unas misiones de micro gestión, una de ellas versa sobre apagar incendios. Tendremos un plano del barco y unos empleados a los que ordenar que cojan el extintor correspondiente y ser muevan hasta el foco del incendio correspondiente. Nada del otro mundo y como las anteriores, misiones monótonas y aburridas. Una variante de estas es el rescate de “hombre al agua” donde tendremos que usar focos y una balsa para recoger a algún tripulante del mar. Todas ellas se desarrollan únicamente sobre el plano y no profundizan en nada.

Técnicamente de otra generación.
La calidad gráfica del juego es muy limitada, hablamos de un título que aparenta ser de Xbox 360. Los efectos climáticos son nefastos, la lluvia es un conjunto de hilos blancos que cruza la pantalla. Además el sonido de la lluvia es un bucle del cual identificaremos su principio y su final claramente. El agua es lo más realista del juego, pero desentona tanto con el modelado del barco, de la tierra y del muelle que hará que todo parezca una maqueta mal terminada.
Si navegamos de noche el mar será totalmente negro, no veremos nada, será como navegar sobre un vacío negro, algo muy real, pero poco motivador para un juego de este tipo, donde tendremos travesías de 20 minutos sin ver nada, ni olas, con un sonido en bucle, sin radar… Os podéis hacer una idea de cuanta diversión puede ofrecer el título.

CONCLUSIÓN
Durante los últimos meses además de este he tenido la oportunidad de probar al menos 7 u 8 de estos simuladores. Haciendo un poco de memoria me llegan a la memoria el Potion Craft, Ship Graveyard Simulator, Power Wash Simulator, Rover Mechanic Simulator, etc. Todos ellos tenían muchas diferencias, pero también cosas en común. Técnicamente era muy justos, gráficamente de generaciones anteriores, además muchos no suponían algo novedosa para el género, pero si que casi todos tenían en común lo mismo. Eran altamente divertidos y adictivos. Da igual que no quieras limpiar, ni desguazar barcos o hacer pociones, al final acabamos enganchando en una mecánica perfectamente diseñada y ejecutada para atraparnos un buen puñado de horas.

Ships Simulator cumple con todos con casi todos estos parámetros. No es un juego técnicamente destacado, tampoco parece d de Xbox One, más bien es un título de épocas pasadas como Xbox 360, tanto gráficamente como a nivel sonoro. Tampoco destaca por tener un argumento o hilo conductor ilusionante, pero en lo que, si se diferencia del resto, es en su jugabilidad. Mientras otros títulos son adictivos, este además no atrapar, es monótono y no aporta diversión alguna, más bien lo contrario. Se trata de un título que tiene poco de divertido; sus anodinos paseos por el mar, tediosa jugabilidad y parquedad en menús y opciones son un candando más para el contenedor de donde jamás debió salir.